La IRU ha informado a la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) de las nuevas medidas que se han comenzado a aplicar en Alemania y que afectan a los profesionales del transporte de mercancías por carretera.

Alemania ha incluido a la República Checa en la lista de países de la “nueva variante Covid-19” y, en consecuencia, los conductores procedentes de este país, incluidos los que acaban de transitar por su territorio, deberán presentar un test negativo para entrar en Alemania. 

La prueba que exigirán las autoridades checas no debe tener una antigüedad superior a 36 horas y se aceptan tanto PCR como pruebas de antígenos, siempre que se hayan realizado en un laboratorio acreditado. Para verificar el cumplimiento de esta medida, la República checa introducirá controles aleatorios en las fronteras.

Aún no se ha confirmado de manera oficial, pero lo más probable es que solo se permita la entrada para el transporte de mercancías y el tránsito si se garantiza la salida del territorio alemán.

Recordamos que será necesario que los conductores porten el certificado que emitió la Comisión Europea para demostrar el fin de su viaje. El documento puede descargarse en nuestra página web a través del siguiente enlace: certificado_comision_europea.pdf (cetm.es)

Controles en Austria

En Austria, habrá controles en el paso del Brennero para comprobar si los conductores tienen resultados negativos en las pruebas, de lo contrario se les denegará la entrada. La posibilidad de realizar pruebas a lo largo de la red de autopistas austriacas no es posible por razones de capacidad de las estaciones de prueba y de las áreas de estacionamiento.

Asimismo, Tirol ha empezado a controlar el tráfico de camiones procedentes de Italia para evitar atascos y la paralización en el Inntal.

Realización de pruebas en Italia

Para minimizar las molestias a los transportistas que se dirijan a Alemania a través del territorio austriaco, donde están obligados a mostrar una prueba Covid-19 negativa realizada en las últimas 48 horas, el Gobierno italiano ha empezado a crear estaciones donde los profesionales del transporte podrán realizarse dicha prueba.